Después de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, estableciera como condición para la compra de deuda de países en problemas que éstos acudan antes al fondo de rescate europeo, el mandatario ibérico Mariano Rajoy dijo que no tomará una decisión en ese sentido hasta tanto se conozca el plan de la comunidad europea para mantener la moneda común. Reiteró que hará "lo conveniente" para evitar el hundimiento de su país y prometió no volverá a impulsar una reforma ni a tocar las pensiones.
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El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró hoy que no hay "ninguna decisión" tomada sobre la posibilidad de acudir a un rescate soberano europeo, en una comparecencia en La Moncloa para hacer balance de sus siete meses de gobierno y presentar la grave situación de España.
"No tengo tomada ninguna decisión" sobre acudir o no a un rescate europeo, dijo Rajoy, un día después de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, estableciera como condición para la compra de deuda de países en problemas como España que éstos acudan antes al fondo de rescate europeo FEEF.
"Yo haré lo que creo que conviene al interés general de los españoles", indicó, y puso como ejemplo la petición de ayuda en junio al Eurogrupo, que ha comprometido hasta 100.000 millones de euros para el rescate del maltrecho sector bancario español.
Un día después de comparecer ante la prensa en el mismo lugar junto al primer ministro italiano, Mario Monti, quien admitió que su Ejecutivo aún debe analizar si sigue o no el camino marcado por Draghi, Rajoy dijo que "cada uno toma las decisiones que estima conveniente".
Ayer, tras la reunión con Monti, Rajoy evitó en todo momento pronunciarse sobre si estudiará o no la posibilidad de esa especie de rescate encubierto.
En conferencia de prensa luego de la reunión del gabinete, Rajoy esbozó un negro panorama de la situación de España, informó la agencia de noticias DPA.
"La salida de la crisis es un objetivo nacional" y "todos debemos remar en la misma dirección", dijo, en un momento en el que varias comunidades autónomas que han amenazado con sublevarse por los objetivos de estabilidad presupuestaria que el gobierno las obliga a cumplir con el objetivo de reducir el déficit público.
El presidente del gobierno español también se dirigió directamente a la oposición.
"Yo necesito que se me ayude en la batalla europea", pidió.
No obstante, aseguró que la puerta está abierta a la esperanza, defendiendo sus medidas y reformas, muchas de ellas muy impopulares, como los recortes, que han causado gran malestar social y por los que los ciudadanos están saliendo a la calle.
"Cuando se actúa con constancia y perseverancia, los resultados llegan", aseguró.
"El gobierno sabe perfectamente a dónde va, el gobierno sabe lo que tiene que hacer".
Sacar a España de la crisis es, según Rajoy, una tarea "enorme", pero no "imposible". Será "más llevadera si todos nos comprometemos", instó.
FUENTE: Telam