El hallazgo del cadáver de un adolescente palestino en un bosque de la parte árabe de Jerusalén ha desatado enfrentamientos en la parte Este de la ciudad. Decenas de soldados israelíes se han desplegado frente a la casa de Mohamad Husein Abu Jedeir, de 16 años, un joven desaparecido anoche en el barrio de Shuafat y encontrado muerto hoy, cuando unas 300 personas comenzaron a congregarse en las inmediaciones del edificio. A medida que aumentaba la tensión, algunos de los concentrados comenzaron a lanzar piedras y otros objetos contra las tropas, que respondieron con métodos antidisturbios.
La Policía israelí ha admitido que investiga un posible caso de venganza por la muerte de tres estudiantes judíos. Testigos explicaron que anoche vieron cómo un chico era obligado a entrar en un coche a la salida de la mezquita en el barrio de Shuafat, cerca de una zona comercial situada en Jerusalén Este. "La policía descubrió el cuerpo en un bosque de Jerusalén y ahora se investiga si hay conexión con el chico desaparecido", explicó el portavoz de la Policía, Micky Rosenfeld.
La Policía israelí ha admitido que investiga un posible caso de venganza
Anoche, cuatro adolescentes israelíes ya fueron detenidos tras atacar a dos palestinos que trabajaban en el centro de Jerusalén, donde decenas de personas se manifestaron al grito de "muerte a los árabes" para pedir venganza. Según medios locales, agentes de policía arrestaron a un joven judío enmascarado cuando trataba de atacar a un empleado de una famosa cadena de comida rápida estadounidense situada en la parte peatonal de la ciudad santa.
Otros tres adolescentes fueron igualmente detenidos cuando intentaban una acción similar contra un palestino de origen beduino, igualmente empleado en el corazón comercial de Jerusalén, donde trabajan numerosos palestinos. La edición digital del diario Yediot Aharonot informó, asimismo, de enfrentamientos en la calle Jaffa, donde manifestantes bloquearon los accesos, trataron de entrar en el mercado de Menahe Yehuda y gritaron consignas exigiendo a Israel que vengue el asesinato de los tres jóvenes estudiantes.
Además, un grupo de colonos judíos incendiaron una granja de animales palestina en la aldea de Aqabra, al sur de la ciudad cisjordana de Nablus. Los atacantes entraron en la granja de ovejas sobre las 3:00 hora local (0:00 GMT) y escribieron con spray "venganza sangrienta", explicó Gasan Daglash, responsable del centro palestino que vigila la actividad de los colonos.
RESPONSABILIDAD DEL GOBIERNO ISRAELÍ
La Policía israelí elevó el lunes la alerta de sus fuerzas al nivel 3, de un total de 5, tras el hallazgo de los cadáveres de los tres jóvenes judíos secuestrados el pasado 12 de junio cuando hacían autostop en Cisjordania, por el temor a un deterioro de la situación y a posibles represalias por nacionalistas judíos. Las miradas apuntan al grupo "Tag Mehir" (El precio a pagar), con un largo historial de ataques contra blancos palestinos, como el más propicio para una acción de venganza.
El diputado Ahmed Tibi, escoltado por otros dos representantes de los tres partidos árabes en el Parlamento israelí, se quejó de que Israel "diferencie entre la sangre de un niño judío y la de un palestino". "No hay un tratamiento igualitario y dicen que la sangre de un niño judío es más valiosa que la de un palestino", subrayó en declaraciones a un grupo de periodistas.
Abás exige una condena explícita de Netanyahu "como hicimos nosotros con el asesinato de los tres jóvenes israelíes"
Los tres cargaron la responsabilidad sobre los hombros del primer ministro, Benjamin Netanyahu, al que acusaron de no poner freno a las provocaciones de los colonos ultranacionalistas que se repiten en los últimos meses. "Estamos muy enfadados y tristes. El Gobierno de Israel, su primer ministro, y sus ministros son responsables de provocar y por tanto del secuestro y asesinato de este chico", afirmó Tibi. "Desde hace trece años, un niño palestino muere cada tres días a manos del Ejército israelí. Este crimen sucedió bajo responsabilidad de la Policía, las fuerzas de seguridad y el gobierno israelíes", concluyó.
Momentos antes, Netanyahu había exhortado a la calma a israelíes y palestinos y a "no tomarse la justicia por su mano", y recordado que Israel "es un estado de derecho". Según un comunicado, el político derechista ha pedido al ministro Seguridad Pública, Yitzhak Aharonovitch, que resuelva el caso lo antes posible y descubra "quién está detrás de este deplorable asesinato y sus motivaciones".
Unas palabras que no le parecieron suficientes al presidente de la Autoridad Nacionalidad Palestina (ANP), Mahmud Abás, quien exigió una condena explícita del jefe del Gobierno israelí "como hicimos nosotros con el secuestro y asesinato de los tres israelíes". En su comunicado, Abás pidió, asimismo, a Israel que "adopte las medidas necesarias para frenar los ataques de colonos y el caos que producen".
FUENTE: Público