Los enfrentamientos violentos entre palestinos e israelíes se intensifican y extienden desde el este de Jerusalén hacia los pueblos árabes en sus cercanías, atizados por reportes de autopsia publicados prematuramente según los cuales un joven palestino fue quemado vivo. Los informes definitivos no se han dado a conocer todavía. El Gobierno de Israel no desestima que Mohammed Abu Khudair, de 16 años, haya sido secuestrado y asesinado en un acto de venganza por el homicidio de tres estudiantes de un seminario judío, confirmado un día antes (30.6.2014).

El hecho de que estos crímenes sean atribuidos a extremistas israelíes y palestinos no ha impedido que los casos se politicen, justo cuando Hamas –tipificada como una organización terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos– había hecho concesiones nada desestimables para allanar el camino hacia la paz entre ambos pueblos.

OBSTÁCULOS EN EL CAMINO HACIA LA PAZ.

El hecho de que estos crímenes sean atribuidos a extremistas israelíes y palestinos no ha impedido que los casos se politicen, justo cuando Hamas –tipificada como una organización terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos– había hecho concesiones nada desestimables para allanar el camino hacia la paz entre ambos pueblos. Ahora, miles de palestinos salen a protestar, la policía israelí es acusada de hacer uso excesivo de la fuerza y los militares israelíes lanzan ataques en respuesta a una treintena de misiles lanzada desde la Franja de Gaza en lo que va de fin de semana.

Este 6 de julio, aviones de combate israelíes abrieron fuego sobre el enclave controlado por Hamas. Un dispositivo lanzacohetes, una fábrica de armamento y otros ocho objetivos fueron destruidos poco después de que un misil palestino fuera interceptado por el sistema de defensa israelí Iron Dome sobre Beerseba, una ciudad localizada 108 kilómetros al sur de Tel Aviv. A estos acontecimientos se suma un incidente que ha enturbiado las relaciones entre Jerusalén y Washington: el maltrato que supuestamente recibió un estadounidense a manos de la policía israelí.

MUCHOS CLAMAN POR UNA TERCERA INTIFADA

Los padres de Tariq Abu Khdeir, primo de Mohammed Abu Khudair, aseguran que el quinceañero fue golpeado brutalmente por los agentes de seguridad israelíes cuando éste protestaba por el asesinato del joven palestino. La policía local alega que Tariq Abu Khdeir se resistió al arresto, agredió a los oficiales y tenía en su poder una honda para lanzar piedras al momento de ser detenido. El Departamento de Estado de Estados Unidos demandó una investigación y dijo estar “muy preocupado” por los reportes de que el adolescente fue golpeado por policías israelíes.

Los árbitros habituales en el conflicto palestino-israelí temen que éste se profundice; muchos palestinos claman porque se inicie una tercera intifada (levantamiento general) en contra de Israel. Sin embargo, el servicio secreto de Egipto interviene como mediador entre Israel y el grupo islamista Hamas en un intento de lograr que ambas partes acuerden una nueva en la Franja de Gaza. Así lo informó este 6 de julio la radio israelí.

FUENTE: DW