Tsipras sostuvo que la postura europea "obligó al Banco de Grecia a activar las medidas de cierre temporal de los bancos y la limitación de los retiros bancarios". Al mismo tiempo, aseguró que "los depósitos de los ciudadanos en los bancos griegos están absolutamente garantizados".
En un mensaje televisado, informó que volvió a pedir a la Unión Europea y el Banco Central Europeo (BCE) una extensión del programa de ayuda para el país, que le había sido rechazada el sábado. Indicó que formuló esta demanda "al presidente del Consejo Europeo y a los 18 dirigentes de los Estados miembros, además del presidente del BCE, de la Comisión y del Parlamento Europeo" y dijo que "esperaba una respuesta inmediata".
El premier acusó al Eurogrupo de "chantajear" al pueblo griego al rechazar una nueva prórroga de unos días antes del referéndum del próximo domingo, en el que la sociedad helena decidirá si acepta o no las medidas de ajuste que demandan los acreedores internacionales para liberar fondos que permitan a Atenas pagar sus compromisos de deuda y mantener la liquidez de sus bancos.
"Las recientes decisiones del eurogrupo y el BCE sólo tienen un objetivo: intentar reprimir la voluntad del pueblo griego", dijo Tsipras sobre la decisión de los ministros de Finanzas de la eurozona del sábado de rechazar el pedido de Grecia de extender el rescate hasta julio. "No triunfarán. Sucederá lo exactamente opuesto: el pueblo griego se mantendrá firme con una tenacidad aún mayor", añadió el primer ministro griego. "La dignidad del pueblo griego frente al chantaje y la injusticia enviará un mensaje de esperanza y orgullo a toda Europa", concluyó.
Tsipras sostuvo que la postura europea "obligó al Banco de Grecia a activar las medidas de cierre temporal de los bancos y la limitación de los retiros bancarios"
Grecia definirá en un referéndum el próximo domingo si el país aceptará o no más ajuste. El presidente griego, el conservador Prokopis Pavlopulos, promulgó hoy la convocatoria al referéndum, después de que el Parlamento aprobara ayer el llamado a las urnas en una maratónica sesión que duró más de 15 horas y demostró el clima de tensión que se vive en el empobrecido país del sur de Europa.
El referéndum será vinculante y para que su resultado defina el futuro del país al menos un 40 por ciento de la población debe votar. Aún no hay encuestas que pronostiquen cuál será la opinión pública el próximo domingo. Lo único que se sabe es a qué llamarán a votar cada partido político. Mientras el gobierno pidió apoyar el No, los principales partidos de derecha y centro-derecha llamaron a apoyar el Sí.