El inesperado acercamiento entre Estados Unidos y Rusia en la ONU 

En el tercer aniversario del comienzo de la guerra en Ucrania, la ONU adoptó dos resoluciones, una redactada por Ucrania y los europeos y otra redactada por Estados Unidos que fue enmendada por la asamblea para incluir el lenguaje de apoyo a Ucrania. Esas votaciones dieron a Ucrania y a los estados europeos una victoria diplomática sobre Washington.

El voto, que condenaba la invasión rusa de Ucrania, fue apoyado por 93 países, pero 18 naciones, entre ellas EE.UU., votaron en contra, lo que significó un giro  importante en la postura estadounidense. Sin embargo, este hecho se produjo después de que Trump decidiera iniciar conversaciones directas con Rusia para poner fin a la guerra. Además, la votación en las Naciones Unidas tuvo lugar mientras Trump recibía al presidente francés, Emmanuel Macron, en Washington. La reunión se produjo en un momento de tensiones globales, con conflictos en Europa del Este, desafíos económicos y la necesidad de coordinar esfuerzos frente a la crisis climática. Ambos líderes destacaron la importancia de revitalizar la relación bilateral y trabajar juntos en temas de interés común.

Por un lado Macron con objetivos claros el de fortalecer la posición de los aliados europeos, evitar que los intereses de Ucrania y Europa sean ignorados y conseguir “garantías de seguridad” para las naciones europeas ante las amenazas de Putin. Por su parte, Trump reiteró su postura de priorizar los intereses estadounidenses y abogó por una mayor contribución financiera de los aliados europeos en materia de defensa. 

La resolución finalmente adoptada señala “con preocupación que la invasión a gran escala de Ucrania por parte de la Federación Rusa ha persistido durante tres años y continúa teniendo consecuencias devastadoras y duraderas no solo para Ucrania, sino también para otras regiones y la estabilidad global” y “llama a una desescalada, un cese temprano de las hostilidades y una resolución pacífica de la guerra contra Ucrania”.

Mientras que Estados Unidos presentó ante la Asamblea General otro documento en donde no calificaba a Rusia de agresor ni reconocía la integridad territorial de Ucrania. 

El futuro acuerdo de libre comercio entre la India y la Unión Europea

Ante las declaraciones del primer ministro indio, Narendra Modi, tras entrevistarse con la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen ambos están de acuerdo en firmar un acuerdo de libre comercio antes de que finalice el año 2025.
Si se concreta representaría un hito significativo en las relaciones económicas y comerciales entre dos de los actores más importantes en la escena internacional. Este acuerdo, que ha sido objeto de negociaciones intermitentes desde 2007, busca eliminar aranceles, reducir barreras no arancelarias y facilitar el comercio de bienes y servicios entre ambas partes. India, como una de las economías de más rápido crecimiento en el mundo, y la UE, uno de los bloques comerciales más grandes, tienen el potencial de crear una asociación estratégica que beneficie a más de 1.800 millones de personas.

"Un acuerdo de libre comercio entre la UE e India sería el mayor de este tipo en todo el mundo", declaró este viernes en Nueva Delhi la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen.

Mientras que Donald Trump amenaza a la Unión Europea con imponer nuevos aranceles a sus productos, el bloque de los 27 busca nuevas oportunidades y la India es una de ellas,ya que la UE es uno de los mayores socios comercial con cerca de 129.000 millones de dólares en intercambios de mercancías en 2023, es decir, más del 12% del total del comercio indio.

Uno de los principales objetivos del acuerdo es diversificar las cadenas de suministro y reducir la dependencia económica de China, especialmente después de la pandemia de COVID-19 y las tensiones geopolíticas recientes.

Por un lado, la UE espera conseguir acceso al mercado indio para sus automóviles y bebidas espirituosas, a pesar de los elevados aranceles indios. Por otro lado, India busca acceso preferencial a los mercados europeos para sectores clave como textiles, productos farmacéuticos y servicios de tecnología de la información, donde tiene una ventaja competitiva significativa.

Pero sin duda las negociaciones no serán fáciles, vienen de estar paralizadas durante una década, entre 2013 y 2022. Entre los principales obstáculos, está la protección de los derechos de propiedad intelectual, un tema importante para la UE, que busca salvaguardar sus innovaciones tecnológicas y farmacéuticas. India, por su parte, ha expresado preocupaciones sobre los estándares laborales y ambientales que la UE podría imponer, los cuales podrían aumentar los costos de producción para las empresas indias. Además, de la agricultura, ya que la UE protege fuertemente a sus agricultores, mientras que India busca exportar más productos agrícolas a Europa.

Elecciones en Alemania: triunfo de los conservadores

Como anticiparon la mayoria de las encuestas, los conservadores de la Unión Demócrata Cristiana de Alemania y la Unión Socialcristiana de Baviera ganaron las elecciones federales alemanas. Obtuvieron 28,5% de los votos en unos comicios con una alta participación alrededor de 82,5% número que no se veía desde antes de la reunificación del país en 1990. Lo que indica que el próximo canciller de la República Federal Alemana será Friedrich Merz, un conservador.
Sin embargo, al no contar con la mayoría de los escaños en el Parlamento, la CDU/CSU deberá formar un gobierno de coalición. 

En segundo lugar estuvo el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) liderada por Alice Weidel, que obtuvo 20,8% de los votos fue el desempeño más fuerte de un partido de extrema derecha en Alemania desde la Segunda Guerra Mundial.

Una tendencia que no es nueva es que la extrema derecha obtenga puestos de poder en el Viejo Continente. En Francia, la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, Hermanos de Italia con Giorgia Meloni al frente y, en España, Vox con Santiago Abascal son ejemplos de este ascenso.

El gran perdedor fue el Partido Socialdemócrata (SPD) del actual canciller, Olaf Sholz, que desde 2021 lideró la llamada «coalición semáforo», integrada también por el Partido Democrático Libre (FDP) y Los Verdes. Los socialdemócratas alcanzaron apenas 16,4% de los votos, en el que constituye su peor desempeño en la historia de la República Federal Alemana.

Entre las principales preocupaciones de los ciudadanos alemanes en estas elecciones estaban la paz y la seguridad en Europa, la economía y las cuestiones sociales. Sin embargo, el líder del Partido Cristianodemócrata (CDU), Friedrich Merz, también ha dado prioridad a la política migratoria tras la serie de atentados perpetrados por ciudadanos de origen extranjero.

Merz está presionado para formar un Gobierno estable y ya inició conversaciones con los socialdemócratas de centro-izquierda (SPD) aunque por el momento se negó a pactar con AfD al aplicar el límite contra el partido extremista en un país donde aún sigue vivo el recuerdo del nazismo.

(*) Internacionalista de Fundamentar