Dos de ellos son niños, que fallecieron tras ser aplastados por árboles. El alcalde de la ciudad ha dicho que el número puede seguir aumentando. Los daños económicos causados por los efectos del huracán Sandy podrían ascender a entre 30.000 y 50.000 millones de dólares, por encima de las estimaciones iniciales y de la tormenta Irene del pasado año.