Cerca de 2 mil millones de dólares de ayuda para hacer frente a la marea de decenas de miles de niños indocumentados procedentes de Centroamérica, solicitó el presidente estadounidense, Barack Obama,al Congreso de ese país.
Este flujo de niños inmigrantes indocumentados ha fortalecido el desacuerdo entre Obama y los republicanos de la Cámara de Representantes, sobre la necesaria reforma radical del sistema migratorio en el país norteamericano.
El presidente norteamericano aseguró que las agencias en la frontera se enfrentan a un "significativo" aumento de los arrestos de menores procedentes de Centroamérica. Algunos han sido víctimas de crímenes violentos, abusos y extorsiones por parte de los traficantes de personas.
Este flujo de niños inmigrantes indocumentados ha fortalecido el desacuerdo entre Obama y los republicanos de la Cámara de Representantes, sobre la necesaria reforma radical del sistema migratorio en el país norteamericano.
El mandatario estadounidense pidió, además, enviar más recursos a la frontera sur, con la finalidad de acelerar el proceso de deportación de quienes ingresan ilegalmente.
De ser aprobada, la medida se aseguraría de que las deportaciones se manejen de manera adecuada, sin dejar de garantizar la protección de los refugiados y de quienes solicitan asilo, expresó el presidente Obama.
También pidió que el Departamento de Seguridad Interior tenga la autoridad para procesar y deportar a los menores inmigrantes a sus países de origen, entre los cuales se registran Guatemala, Honduras y El Salvador.
Cerca de 52 mil niños y jóvenes menores de 17 años, que viajaban sin compañía de un adulto, han sido detenidos en la frontera desde octubre.
FUENTE: Telesur