Estamos en un punto de inflexión, dijo el Almirante Michael S. Rogers, quien también dirige la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), en una audiencia en el Comité de Servicios Armados del Senado. “Tenemos que reflexionar sobre cómo podemos aumentar nuestra capacidad ofensiva para llegar a ese punto de disuasión”.
Rogers dijo que el Comando, que fue lanzado en 2010, se ha enfocado sobre todo en la defensa. Pero agregó que “al final, una estrategia puramente defensiva y reactiva será siempre tardía y consumirá muchos recursos”
Su testimonio retoma donde había dejado su predecesor, el General retirado Keith Alexander. Alexander, quien se retiró el año pasado y fundó una empresa de Ciberseguridad, había presionado durante mucho tiempo para obtener mayores capacidades ofensivas. Pero los temores de la Casa Blanca, del Departamento de Estado e, incluso, algunos provenientes del Pentágono sobre que el uso de Ciberarmas podría detonar consecuencias no deseadas y dañar las relaciones diplomáticas, han retrasado su desarrollo.
Cuando el Senador John Mc Cain le preguntó sobre si compartía la opinión de que “el nivel de disuasión no está disuadiendo”, Rogers dijo “Eso es cierto”.
Rogers dijo que el presidente Obama aún no ha decidido delegarle la autoridad para desarrollar herramientas ofensivas.
Él indicó que los decisores aún no estaban convencidos de que fuera el momento oportuno. “Tenemos que elevar el nivel de comodidad y conocimiento de nuestros decisores sobre qué capacidades disponemos y qué podemos hacer”, dijo.
Cuando el Senador John Mc Cain le preguntó sobre si compartía la opinión de que “el nivel de disuasión no está disuadiendo”, Rogers dijo “Eso es cierto”.
Rogers enfatizó que el nivel de amenaza está aumentando. Los atacantes no sólo quieren perturbar, sino que también buscan establecer una presencia persistente en nuestras redes, dijo. También manifestó que ve un vínculo fuerte y directo entre los hackers individuales en Iran, Rusia y China y los Estados-Nación dirigiendo un ataque o intrusión. En esa línea, anunció que el Comando buscará signos de que gobiernos extranjeros están tratando de confundir a los analistas al utilizar socios por fuera del gobierno, así su actividad no es tan fácil de vincular con el Estado.
*Traducido por Pedro Arrospidegaray - FUNIF Rosario
FUENTE: Washington Post