Tras cerrar la jornada bursátil del martes con una clara subida, Wall Street se desplomó alrededor de las 22.30 hora local y los valores futuros del Dow Jones de Industriales perdieron cerca de 700 puntos. Y esa caída no fue fortuita: en general, los mercados cayeron con fuerza a medida que los resultados electorales en Estados Unidos le auguraban a Donald Trump, candidato presidencial republicano, mayores probabilidades de éxito que a su rival, Hillary Clinton.
El peso mexicano, señalado por los expertos como un indicador del sentimiento del mercado sobre las posibilidades de Trump de convertirse en timonel de la Casa Blanca, perdió alrededor de un 8 por ciento de su valor con respecto al dólar. Durante los últimos meses, la divisa mexicana ha oscilado con fuerza en función de las encuestas electorales estadounidenses, después de que Trump prometiese renegociar el acuerdo comercial con el país vecino. Mientras tanto, valores considerados refugio como el oro subían con claridad.
Los operadores están buscando seguridad a la espera de la apertura de este miércoles (9.11.2016) en el parqué neoyorquino. El nerviosismo llegó también a Asia, donde la Bolsa de Tokio, ya abierta, llegó a caer casi un 3 por ciento en el primer tramo de la sesión tras conocer los recuentos en varios estados clave de las elecciones estadounidenses. En los últimos días, los inversionistas habían apostado por las compras confiando en una victoria de la candidata demócrata, Hillary Clinton.
El lunes Wall Street vivió su mejor jornada en ocho meses, con un subida del 2,08 % en el Dow Jones y de un 2,22 % en el selectivo S&P 500; mientras que este martes esos indicadores avanzaron un 0,40 % y un 0,38 %, respectivamente. En los últimos años, independientemente del resultado, los mercados han reaccionado habitualmente a la baja tras las elecciones. En 2012, el Dow Jones respondió con una bajada del 2,36 % a la victoria de Barack Obama, mientras que el S&P 500 retrocedió un 2,37 %.
En 2008, el Dow Jones se había desplomado un 5,05 % y el S&P 500 un 5,27 %. Los analistas, además, anticipan que en la primera parte del mandato de un nuevo presidente los mercados están en retroceso porque quien ocupa la Casa Blanca suele aplicar las medidas más duras al inicio de su gestión. Actualmente, las grandes plazas ansían una victoria de Clinton, que representa para las finanzas globales un mensaje de estabilidad frente a la incertidumbre y volatilidad que simboliza el republicano Donald Trump.
FUENTE: DW
RELEVO Y EDICIÓN: Joel Hernán González