El presidente, Juan Manuel Santos, y el jefe de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), Rodrigo Londoño, suscribirán el pacto en una ceremonia en el Teatro Colón, a pocas cuadras del palacio presidencial, en pleno centro de Bogotá.

El acuerdo es defendido por los partidos de la coalición gobernante de centro-derecha Unidad Nacional, con el respaldo de partidos independientes y de la oposición de izquierda.

La única agrupación que se opone es la de derecha radical Centro Democrático, que dirige el expresidente y ahora senador Álvaro Uribe, que cuenta con cerca del 20% de las bancas en el Senado y un poco menos en la Cámara de Representantes, por lo que se estima que el oficialismo no tendrá problemas con la refrendación.

Santos y Londoño suscribieron un primer acuerdo el 26 de septiembre en Cartagena de Indias, en una ceremonia con más de 2.000 invitados, entre ellos 15 jefes de Estado y delegados de diversos organismos internacionales. No obstante, dicho pacto quedó en el limbo y no se pudo implementar al ser rechazado por una estrecha mayoría de votantes en el plebiscito del 2 de octubre.

Tras el fracaso, Santos convocó a todas las fuerzas políticas en un intento por salvar el proceso de paz que busca terminar con 52 años de confrontación armada, en especial al Centro Democrático, al que pidió presentar sus reparos para una renegociación del acuerdo.

Los promotores de la campaña por el voto del "no" en el plebiscito presentaron cerca de 500 propuestas de modificación en 57 ejes temáticos, que fueron planteadas entonces por el Gobierno a las FARC en La Habana, sede de las negociaciones durante cuatro años.

Al final, el Gobierno y las FARC aceptaron hacer modificaciones en 56 de los 57 temas. El único punto rechazado fue la propuesta de que los jefes de las FARC que cometieron delitos no pudiesen ser elegidos en cargos por votación popular.

El presidente del Senado, Mauricio Lizcano, anunció que es posible que la votación del nuevo acuerdo se haga el martes en el Senado y el miércoles en la Cámara de Representantes, después de un debate de control político en el que participarán todas las bancadas y en el que no tendrán representación las FARC.

FUENTE:  Ámbito

RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Camila Abbondanzieri