El fallecimiento el viernes del líder cubano, fue lamentado por líderes de todo el mundo, pero celebrado por detractores, como grupos de cubanos estadounidenses en la ciudad de Miami, que festejaron en calles de la Pequeña Habana.
"Queremos trasmitir nuestro saludo de solidaridad de acompañamiento a todo el pueblo de Cuba en estos días de despedida a la fuerza inmortal del comandante Fidel Castro", dijo el presidente venezolano, Nicolás Maduro, al llegar a la isla. "Dos gigantes infinitos, padre e hijo, de dos revoluciones hermanas la cubana(...) y la venezolana", agregó el mandatario de Venezuela, aliado clave de la isla durante más de tres lustros, heredero político del fallecido Hugo Chávez, quien consideraba a Castro como un padre y mentor.
Además de Maduro, otros presidentes de izquierda de la región como Evo Morales de Bolivia, Rafael Correa de Ecuador, Daniel Ortega de Nicaragua y Salvador Sánchez de El Salvador, que se han referido a Castro como un ejemplo para el mundo, son esperados para un acto masivo por la noche.
El Gobierno de la isla decretó nueve días de duelo en homenaje al líder, incluyendo la ceremonia de inhumación de sus cenizas el domingo en el cementerio de Santa Ifigenia, de la oriental ciudad de Santiago de Cuba, donde comenzó la histórica revolución que acabó derrocando al dictador Fulgencio Batista.
El presidente Raúl Castro y otros miembros de su Gobierno honraron al exmandatario en una ceremonia privada el lunes, en la cual firmaron el libro que los compromete a seguir su legado socialista.
La televisión estatal dijo que el acto tuvo lugar en una sala del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, donde descansaban las cenizas del comandante, quien habría sido cremado el sábado en la mañana.
Sus cenizas serán llevadas desde el miércoles y hasta el sábado a Santiago de Cuba, siguiendo un itinerario que rememora "La Caravana de la Libertad", el trayecto que hizo Fidel Castro con otros revolucionarios en enero de 1959.
También se espera la presencia de otros mandatarios como el mexicano Enrique Peña y el colombiano Juan Manuel Santos, a quien La Habana abrió sus puertas para ser sede de las negociaciones de paz con la guerrilla de las FARC, y otras representaciones de países del continente, Europa, África.
Las autoridades cubanas anunciaron que el martes serán suspendidas las clases y los diferentes centros laborales "facilitarán la participación de sus trabajadores" en los tributos al líder, a quienes sus enemigos políticos consideran un dictador.
"Despedimos a Fidel con un hasta luego. Fidel supo combinar Revolución, Patria, y Pueblo, entregando su vida y obra al país", dijo Elizabeth Álvarez, una estudiante cubana de 14 años que firmó el lunes el libro de condolencias en la Plaza de la Revolución.
Los cubanos asistieron el lunes en masa a homenajear a Castro, cuya partida ha dejado un vacío entre sus seguidores en momentos en que la isla está llevando a cabo reformas económicas y un proceso de acercamiento con Estados Unidos, que muchos temen se enfríe con la llegada de republicano Donald Trump a la Casa Blanca, en enero.
El acto central del lunes se llevó a cabo en el Memorial "José Martí" en La Habana, en el corazón de la Plaza de la Revolución, donde Castro dio extensos y concurridos discursos durante su Gobierno, aclamados por decenas de miles de personas. Allí fueron habilitadas tres salas en las que había imágenes de Castro ataviado con su tradicional uniforme militar verde olivo, botas de combate, gorra, mochila y fusil al hombro. Debajo de cada foto se exhibían condecoraciones y fueron colocadas flores blancas.
FUENTE: Ámbito
RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Camila Abbondanzieri