Barack Obama tiene previsto realizar en marzo su primera visita a tierra palestina como presidente de Estados Unidos. El mandatario estadounidense se reunirá con las autoridades de Israel y de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) con el fin de reactivar el proceso de paz, según ha informado el Canal 10 israelí. La visita, de tres días, está siendo preparada en secreto y equipos de seguridad de EEUU se encuentran en la zona estos días, agregó la fuente.
Una fuente de la Casa Blanca citada por Reuters, ha confirmado el viaje de Obama que habría sido acordado con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, durante una llamada telefónica el pasado 28 de enero. No dio más detalles ni ofreció una fecha exacta, pero según el canal de televisión israelí la visita está programada para el 20 de marzo.
"El objetivo es reactivar considerablemente el proceso de paz", según fuentes gubernamentales israelíes, que calificaron la visita de "histórica". La fuente de la Casa Blanca ha declarado asimismo que "el inicio del segundo mandato del presidente y la formación de un nuevo Gobierno en Israel ofrece la oportunidad de reafirmar los lazos profundos y duraderos entre ambos países y para analizar el camino a seguir sobre cuestiones de interés mutuo, incluyendo a Irán y Siria".
A diferencia de sus dos predecesores, Bill Clinton y George W. Bush, en sus primeros cuatro años de gobierno el actual presidente estadounidense no visitó a las autoridades de Israel ni de la ANP a pesar de haber estado en la región en varias ocasiones. Esta vez la visita saldrá adelante "después de haber recibido la promesa de que será posible reactivar el proceso de paz", según el veterano corresponsal Emanuel Rozen, y la visita se enmarcará en una gira por la región que también incluirá a Jordania.
La última vez que israelíes y palestinos se sentaron alrededor de una mesa a negociar fue en septiembre de 2010, hacia el final de una moratoria parcial de diez meses que Netanyahu había declarado en la construcción de los asentamientos judíos en Cisjordania. Terminada la moratoria, el presidente de la ANP, Mahmud Abás, abandonó las negociaciones y desde entonces exige la interrupción de las actividades israelíes en los asentamientos como condición para volver al diálogo.
Fuentes diplomáticas en Washington confirmaron al Canal 10 que Obama ha recibido promesas de que podrá hacer "grandes cosas" para la reactivación del proceso negociador y que las últimas declaraciones en ese sentido del primer ministro, Benjamín Netanyahu, no han caído en saco roto. El sábado, al recibir el encargo de formar un nuevo gobierno del presidente israelí, Simón Peres, Netanyahu tendió la mano al líder palestino, Mahmud Abás, y le ofreció regresar a la mesa de negociaciones.
Los resultados electorales en Israel, y la voluntad de Netanyahu de rodearse de una coalición amplia con el apoyo de los partidos de centro, también indican que en su segundo mandato podría tomar decisiones en esa dirección. Pero la idea de que Obama visite Jerusalén en 2013 salió de la presidencia israelí, que organiza en junio una edición especial de la Conferencia Presidencial, foro de debates apadrinado por la jefatura del Estado, con motivo del 90 cumpleaños de Peres.
Según la versión del Canal 10, la Casa Blanca respondió positivamente a la invitación con la condición de que el presidente tenga "una razón diplomática de peso". Las relaciones entre Israel y EEUU se han visto afectadas en los últimos dos años por las tensiones personales entre Netanyahu y Obama, y por las divergencias surgidas sobre el programa nuclear iraní.
RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Imanol Barrangú
FUENTE: Público