Mariano Rajoy anunció ayer en el Congreso de los Diputados el ajuste más duro en la historia de la democracia de España. Mientras su gobierno se prepara para recibir los primeros 30.000 millones de euros del rescate para los bancos en problemas, el líder conservador desgranó un nuevo paquete de duras medidas por valor de 65.000 millones de euros para los próximos dos años y medio.

Entre esas medidas hay una reducción de la prestación por desempleo, suba del IVA (del 18 al 21%), que hasta hace poco aseguraba que no haría, y la supresión de la paga extra de Navidad para todos los funcionarios y altos cargos de la administración. "En la situación actual hoy en España crecer y crear empleo no es posible. Atravesamos la segunda recesión más grave de nuestra historia", dijo Rajoy. "Para el año que viene todas las previsiones apuntan que la recesión continuará", manifestó, echando por tierra ya él mismo la previsión de crecimiento del 0,2% que su gobierno tenía para 2013, en el país de la Unión Europea (UE) con la mayor tasa de desempleo (24,44%). Los 65.000 millones de euros en ajustes se suman a los 27.000 millones que ya incluían los presupuestos generales del Estado para este año -aprobados hace dos semanas-, a los recortes por 9.000 millones de euros que Rajoy aprobó en diciembre, poco después de asumir el poder y a otros 18.000 millones que están aplicando las comunidades autónomas. Se trata del cuarto plan de ahorro desde que Rajoy asumió la presidencia del gobierno, hace más de seis meses.

Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), los dos grandes sindicatos del país, respondieron a Rajoy anunciando una "movilización general" antes de fines de mes contra las nuevas medidas, que calificaron de "atropello", "torpeza" e "injusticia".

"Los españoles hemos llegado a un punto en que no podemos elegir entre quedarnos como estamos o hacer sacrificios. No tenemos esa libertad", dijo Rajoy a los diputados, en una comparecencia en la que dibujó un panorama sombrío de España. No apuntó expresamente a la UE como actor que obliga a España a acometer recortes, pero sus palabras se entendieron rápidamente en ese sentido, después de que el Eurogrupo decidiera otorgar al país este mismo mes un adelanto de 30.000 millones de euros de los hasta 100.000 millones que ha comprometido para el rescate de sus bancos. "Sé que las medidas que les he anunciado no son agradables, pero son imprescindibles", manifestó Rajoy.

En tanto, la "marcha negra" de los mineros españoles que durante 19 días caminaron hacia Madrid para protestar por los recortes del gobierno de Rajoy en el sector del carbón terminó ayer con enfrentamientos con la policía que dejaron más de 70 heridos leves y cinco detenidos. Las protestas de los mineros se han convertido en un nuevo símbolo del descontento de los ciudadanos contra los duros ajustes del gobierno. (DPA)

RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Rafael Pansa