El Gobierno sirio excarcelará a 2.130 prisioneros civiles como parte de un acuerdo entre Damasco y los milicianos armados que, por su parte, dejaron en libertad a los 48 peregrinos iraníes secuestrados el pasado mes de agosto. Los rebeldes secuestraron a los iraníes en la carretera hacia el aeropuerto internacional de Damasco, asegurando que se trataba en realidad de miembros de la Guardia Revolucionaria enviados por Irán para apoyar al régimen de Bashar al Assad. Un diario norteamericano ha publicado que la inteligencia israelí ayudó a evitar que el régimen sirio utilizase armas químicas. No obstante, el analista político Miguel Guaglianone califica la noticia de "artimaña de la Casa Blanca".