Edward Snowden, el exagente de la CIA que filtró documentos secretos sobre las prácticas de ciberespionaje masivo de EEUU ha asegurado este miércoles al South China Morning Post que su objetivo ahora es convencer a Hong Kong para que no acepte la solicitud de extradición que la Justicia estadounidense está preparando.
"No soy ni un héroe ni un traidor, soy un ciudadano estadounidense [...] No estoy aquí para esconderme de la Justicia, estoy denunciando la criminalidad. Dejaré mi caso en manos de Hong Kong y que ellos decidan mi futuro", dijo Snowden en lo que son sus primeras declaraciones desde que el pasado lunes dejara el hotel de Hong Kong en el que había estado escondido las últimas semanas.
"No soy ni un héroe ni un traidor, soy un ciudadano estadounidense [...] No estoy aquí para esconderme de la Justicia, estoy denunciando la criminalidad. Dejaré mi caso en manos de Hong Kong y que ellos decidan mi futuro",
EEUU, que ha reconocido la existencia del Prism, el programa con el que la Agencia Nacional de Seguridad habría estado interceptando comunicaciones telefónicas e emails desde la era Bush. Según la versión de Snowden, Estados Unidos está buscando el modo de presentar cargos contra él.
Como ya sucediera con el soldado Bradley Manning, presunto colaborador de WikiLeaks, y con Daniel Ellsberg, que filtró los Papeles del Pentágono, Snowden puede ser acusado de traición.
"La gente que piensa que cometí un error al elegir Hong Kong malentendió mis intenciones. No estoy aquí para huir de la Justicia, estoy aquí para desvelar hechos criminales", explicó el técnico, que escogió la autoridad administrativa china para ocultarse tras revelar la información.
"Tuve muchas oportunidades para huir de Hong Kong, pero preferiría quedarme y luchar contra el gobierno de los Estados Unidos en los tribunales, porque confío en la ley de Hong Kong", afirmó Snowden, desde un "lugar secreto de Hong Kong".
Snowden trabajaba para una empresa de consultoría externa que prestaba servicios a la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). Filtró información sobre un programa de vigilancia telefónica y de Internet de los servicios secretos estadounidense y huyó a Hong Kong, donde se encuentra en un lugar desconocido desde que el lunes abandonó la habitación de hotel en la que se encontraba alojado.
RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Imanol Barrangú