El Tribunal de Casación, la máxima instancia en Italia, había devuelto a la corte inferior la parte del fallo por evasión fiscal que se refería a la pena con la orden de revisarla, pues consideró que no había sido calculada de forma correcta. Inicialmente la inhabilitación era de cinco años.
La decisión de la corte siguió la propuesta de la fiscalía, mientras que la defensa del tres veces primer ministro italiano había abogado por su reducción al mínimo, de un año.
Para Berlusconi, de 77 años, es bastante más peligrosa la votación que se avecina en el Senado, que podría expulsarlo por la condena en los tribunales por el llamado caso Mediaset.
El letrado Niccolò Ghedini, que representa a Berlusconi, anunció que ahora pedirá ante el Tribunal de Casación -la máxima instancia en Italia- la anulación de la inhabilitación, y que esperará para hacerlo hasta tener la justificación por escrito del fallo de Milán, probablemente en unas semanas.
DOS PROCESOS Y UNA VOTACIÓN MÁS EN MARCHA
Para Berlusconi, de 77 años, es bastante más peligrosa la votación que se avecina en el Senado, que podría expulsarlo por la condena en los tribunales por el llamado caso Mediaset. El comité de inmunidad de la cámara ya recomendó quitarle a Berlusconi sus fueros.
La situación personal del político originó la reciente crisis en el gobierno, ya que Berlusconi ordenó a sus ministros renunciar a sus cargos en la coalición y dejar de apoyar al Ejecutivo de Enrico Letta a menos que fuese indultado. Sin embargo, ante la rebelión entre sus propias filas y las graves consecuencias económicas para Italia, finalmente cambió de postura y apoyó a Letta durante un voto de confianza solicitado por el dirigente de centroizquierda.
El Tribunal de Casación confirmó la condena a Berlusconi en agosto, pero devolvió a la corte inferior la parte del fallo relativa a la pena con la orden de reducirla, pues consideró que no había sido calculada de forma correcta.
El veredicto también incluía una pena de detención domiciliaria durante un año o la realización de servicio social. Berlusconi ha optado por esta segunda opción.
Los miembros del comité del Senado no han decidido aún si la cámara votará el asunto del desafuero de Berlusconi de forma secreta o romperá con la tradición y lo hará de manera pública. El panel volverá a reunirse el 29 de octubre.
Berlusconi podría perder su asiento en el Senado por una ley que prohíbe que personas condenadas formen parte del Parlamento. Sin embargo, él ha pedido a la justicia que la declare anticonstitucional porque penaliza a personas que han cometido delitos antes de que entrara en vigor.
Se estima que los jueces tardarán meses en decidir si el dirigente realiza el trabajo comunitario y de qué tipo.
RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Imanol Barrangú
FUENTE: DW