El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, centró su discurso central del año en la desigualdad social que se ha "acentuado" en el país pese a la gradual recuperación económica, y llamó a actuar de forma decidida para revertir una tendencia que amenaza con dejar atrás a una gran parte de la población.
"Hoy, después de cuatro años de crecimiento económico, las ganancias corporativas y los precios bursátiles casi nunca han estado tan altos y aquellos en la cima nunca han tenido más éxito. Pero los salarios promedio casi no se han movido. La desigualdad se ha acentuado", denunció Obama en su discurso sobre el estado de la nación, la alocución anual en la que prioriza sus políticas para el año que ahora comienza.
"La dura y fría realidad es que incluso en medio de una recuperación, demasiadas personas que viven en Estados Unidos trabajan más que nunca sólo para salir adelante, pero no logran mejorar su situación. Y demasiadas personas todavía no tienen trabajo", lamentó el mandatario.
ADVERTENCIA AL CONGRESO
Ante un Congreso en el que en los últimos años la mayoría republicana en la Cámara Baja ha torpedeado buena parte de sus iniciativas legislativas, Obama advirtió la noche del martes de que está dispuesto a actuar por su cuenta si los legisladores siguen frustrando sus medidas. "Estoy deseoso de trabajar con todos ustedes. Sin embargo, Estados Unidos no se detendrá, ni yo tampoco", advirtió el mandatario.
En el mismo contexto económico situó Obama su renovado llamamiento a que el Congreso apruebe una reforma migratoria de una vez. De hecho, reclamó, este mismo año. "Consigamos este año aprobar una reforma migratoria", apeló Obama.
POLÍTICAS RESPECTO DE AFGANISTÁN E IRÁN
Sí tuvo más tiempo por el contrario para defender sus políticas ante conflictos como Afganistán, a cuyo presidente instó a firmar de una vez a firmar el acuerdo bilateral de seguridad que permitirá, dijo, la presencia de un "destacamento reducido" que apoye a las fuerzas nacionales tras la retirada internacional de tropas este año.
Y también defendió su decisión de apostar por la vía diplomática en el caso de Irán, con la clara advertencia al Congreso de que vetará cualquier intento de emitir nuevas sanciones que saboteen sus esfuerzos por acabar con el programa nuclear de Teherán. "Estas negociaciones van a ser difíciles. Es posible que no tengan éxito", pero "por el bien de nuestra seguridad nacional, tenemos que darle una oportunidad de éxito a la diplomacia", subrayó.
OBAMA INSTÓ A CERRAR GUANTÁNAMO
"Si este Congreso me envía ahora un nuevo proyecto de ley de sanciones que amenaza con descarrilar estas negociaciones, lo vetaré", prometió un Obama que también instó a los legisladores a ayudarle a cerrar este año la denostada prisión de Guantánamo.
"Con el fin de la guerra de Afganistán, éste es el año indicado para que el Congreso levante las restricciones remanentes para los traslados de prisioneros y para que cerremos la prisión de la Bahía de Guantánamo", dijo y subrayó la importancia de dar "ejemplo" en materia de respeto de valores internacionales y cerrar el capítulo de las agresiones. "Estados Unidos tiene que dejar atrás esta situación de estar permanentemente en pie de guerra", subrayó.
REFORMA MIGRATORIA
Obama llamó al Congreso a que 2014 se convierta por fin en el año en que se apruebe una reforma migratoria que, sostuvo una vez más, es buena para la economía del país.
"Consigamos este año aprobar una reforma migratoria", apeló Obama ante la sesión conjunta del Congreso en su discurso sobre el Estado de la Unión, la alocución anual en la que los presidentes estadounidenses establecen sus principios de políticos y de acción para los próximos 12 meses.
En un discurso muy centrado en la economía y en lo que el país necesita -y el Congreso debe hacer- para acelerar la recuperación, Obama insistió en que la reforma migratoria se debe contemplar en este contexto.
RELEVAMIENTO Y EDICIÓN: Imanol Barrangú
FUENTE: DW