El Departamento del Interior dio a Shell el permiso para explorar la zona petrolera del mar de Chukchi, en el norte de Alaska, luego de que el rompehielos Fennica, que la compañía renta y cuenta con un dispositivo de contención de pozo para casos de emergencia, fuera reparado tras sufrir una fisura en el casco.
El Gobierno estadounidense estima que el Ártico contiene un 20 por ciento de los yacimientos mundiales de gas y petróleo no descubiertos.
El permiso era un hecho esperado ya que el departamento había aprobado previamente el programa de exploración de Shell antes de que el Fennica sufriera la avería en el sur de Alaska
Shell obtuvo el usufructo del mar de Chukchi durante el Gobierno del ex presidente George W. Bush.
La compañía ha gastado unos 7.000 millones de dólares en exploración en el Ártico. No lo ha hecho desde el 2012, cuando sufrió una serie de contratiempos en la región, incluida la pérdida de control de una enorme plataforma, de la que la Guardia Costera debió rescatar a 18 trabajadores.
El Gobierno estadounidense estima que el Ártico contiene un 20 por ciento de los yacimientos mundiales de gas y petróleo no descubiertos.
La decisión de Shell de explorar en el área ha provocado una ola de protestas de ambientalistas que quieren proteger a las ballenas, morsas y osos polares en una región vulnerable que los científicos dicen están cambiando rápidamente debido al calentamiento global.
Curtis Smith, portavoz de Shell, dijo que la compañía "espera evaluar lo que potencialmente podría convertirse en una reserva básica nacional de energía".
Shell dijo que era posible que pudiera completar un pozo este verano boreal, pero no divulgó un plazo establecido para las perforaciones.
RELEVAMIENTO Y EDICION: Maria Belen Serra
FUENTE: Reuters