La Asamblea General de Naciones Unidas votó una resolución presentada por el grupo de países árabes que condena los bombardeos de los bastiones rebeldes por la aviación siria, lamenta la "incapacidad del Consejo de Seguridad" para que se apliquen sus decisiones y reclama una transición política en Siria.
_____________________________
La Asamblea General de la ONU ha aprobado este viernes por amplia mayoría una resolución que condena las graves violaciones de los derechos humanos y el uso de armamento pesado por parte del régimen del presidente sirio, Bashar Al-Assad, y que critica la parálisis que vive el Consejo de Seguridad.
Según el primer recuento de la votación, la resolución ha recibido el visto bueno de 133 países, mientras que 31 se abstuvieron y 12 votaron en contra. Entre estos últimos están Rusia y China, además de naciones como Irán, Corea del Norte, Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, entre otras.
En víspera de la votación, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon destacó que "estamos ante la posibilidad de una guerra de largo alcance que destruya las comunidades de Siria y afecte a la región". Según él, la brutalidad que se informa fuera de la ciudad siria de Aleppo puede constituir crímenes de lesa humanidad.
Por su parte, el representante de Siria en la ONU, Bashar al Jafari, dijo que los países que se pronuncian este viernes sobre el conflicto sirio "están despertando a células terroristas durmientes en el país" suministrándoles armas. "Si los Estados que han ayudado a grupos terroristas fueran sinceros, destinarían dinero para ayuda humanitaria", subrayó.
Asimismo, el embajador sirio ante la ONU denunció, que han existido "ataques en su contra y su familia por parte de medios que fabrican mentiras" y exortó a los países a que no apoyen el caos y el intento de legitimar las sanciones unilaterales.
En la misma línea, tanto Venezuela como Cuba ya han adelantado que votarán en contra del proyecto de resolución sobre Siria, porque consideran que impone medidas unilaterales.
El nuevo proyecto, elaborado por Arabia Saudí, que apoya a los rebeldes sirios, exige que el presidente Bashar al-Assad ceda el poder a un nuevo gobierno de transición y que el Ejército sirio detenga sus ataques con tanques y helicópteros contra las fuerzas rebeldes, que, según confirmaron observadores de la misión de la ONU que se encuentran en el país, ya disponen de armas pesadas, tanques incluidos.
Esta resolución exige que las autoridades sirias "se abstengan de usar, transferir, producir, desarrollar o adquirir cualquier arma química o biológica o material relacionado". La cláusula fue añadida después de que Damasco anunciara que posee armas químicas e incluso biológicas que está dispuesto a utilizar si padece una "agresión externa".
FUENTE: RT